Liquido anti-pinchazos casero. Pros y contras

Después de varios años empleando líquido anti-pinchazos en las ruedas de la bicicleta estas son las conclusiones a las que he llegado.

En ningún momento voy a poner en duda el funcionamiento de los líquidos comerciales ya que es complicado que aguante en el mercado algo que no sirve para lo que ha sido concebido. El problema está básicamente en el precio. Aproximadamente, para la rueda de una bicicleta de montaña habrá que gastarse unos 6€ en los 100 ml que se necesitan. Por ese precio se puede comprar un kilo de látex para pintar que mezclado al 50% con agua nos produce casi dos litros de líquido anti-pinchazos para rellenar 20 ruedas. Si la solución casera es veinte veces más barata, hay que probarla.

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Durante mucho tiempo he estado rellenando las cubiertas tubeless con esta mezcla de agua y látex y en general el resultado creo que es bastante bueno teniendo en cuenta el notable ahorro que hay. Pero no todo son bondades ya que he tenido un par de problemas con el líquido casero. El primero fue funcional, resulta que ante pinchazos un poco grandes, la mezcla de látex y agua se escapaba por el pinchazo sin llegar a taponarlo (Esto me pasó especialmente con cubiertas Michelin trabajando a presiones bajas en las que, sin llegar al llantazo, se producían unos pequeños cortes). Para mejorar la mezcla casera le añadí unas virutas de goma y goma pulverizada a la mezcla con lo que yo pensaba muy buenos resultados ya que el problema del “no taponamiento” desapareció.

Pero hace unos días me he dado cuenta del problema que aparece como consecuencia del apaño anterior. Noto que aparece en la rueda delantera un desequilibrio cuando circulo a más de 25 km/h que no me deja soltar las manos del manillar puesto que se amplifica hasta descontrolar la bicicleta.

Puesto que no veo que la llanta esté descentrada o abollada, lo achaco a una posible deformación de la cubierta que no resulta aparente. Desmonto la cubierta (Una Continental Mountain King que casi lleva dos años montada con sus consiguientes rellenos de látex) y esto es lo que me encuentro.

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Una amalgama de goma y latex seco de unos tres cm de diámetro que produce el desequilibrio en la rueda al girar. Días después en otra cubierta que cambio, esta ya por desgaste después de casi un año y varios rellenos del antipinchazos casero, esto es lo que aparece en su interior.

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Un granulado de latex y goma secos que para nada ya cumplen la función para la que han sido metidos dentro de la cubierta.

Con todo lo anterior, que cada uno saque sus conclusiones, pero creo que aunque tenga sus inconveniente, por la diferencia de precio hay que probar el líquido antipinchazos casero.